Para una interacción divertida con las mascotas, extra diversión y enriquecimiento por la acción de tambaleo que añade una dimensión adicional al desafío de lamer el plato de alimentación. Su interior es rugoso, por lo que si le pegamos comidas en las paredes se quedará perfectamente impregnado. También podemos usarlo para poner alimento seco y que deban comerlo de forma más pausada ya que el movimiento les impedirá engullirlo. Es muy adecuado para congelar golosinas líquidas y para untar líquidos en capas, con o sin golosinas sólidas agregadas a la mezcla, para que así su perro pueda pasar horas trabajando en la golosina y encontrar diferentes sorpresas conforme lame y pasa el tiempo.